¿Por qué la mayoría de las personas consideran una amenaza la gran transferencia de riqueza que comenzamos a vivir hoy en día?

La transferencia de riqueza es el movimiento de activos y recursos de una persona o entidad a otra. Esto puede ser en dinero, propiedades, inversiones y otros bienes. Existen varias formas en que esta transferencia puede ocurrir.

Y es que, según los recientes datos de una prestigiosa empresa de gestión de activos que encuestó a 2.700 profesionales financieros en 20 países, estamos en la mayor transferencia de riqueza de la historia.

Se estima que en los próximos 20-30 años aprox los baby boomers y las generaciones mayores transmitirán 84 billones de dólares en patrimonio a familiares. Las generaciones más jóvenes, como la Generación X, los millennials y la Generación Z, se llevarán la mayor parte de estas herencias. Estas generaciones que durante los últimos años han sido educadas e inculcadas a ser emprendedores y “volar por libre” y muchas veces dejando de lado la importancia de saber gestionar esos ahorros e ingresos generados en su actividad empresarial. Y es que ya no sólo es importante por ellos mismos, sino para que el día de mañana sepan ayudar a sus hijos a hacer una buena gestión de ese dinero.

Empezar a saber ahorrar e invertir cuánto antes es fundamental, una buena gestión de los patrimonios financieros puede ser diferencial. Hay que saber aprovechar el interés compuesto resultante de unas buenas inversiones, qué básicamente es que los intereses se reinvierten en el activo y se crea el efecto “bola de nieve”.

Pero el verdadero temor viene cuando nos preguntamos, ¿éstas nuevas generaciones están preparadas para recibir este dinero?

Es cierto que la falta de planificación adecuada en torno a la herencia puede crear complicaciones significativas, tanto para los herederos como para los inversores. En muchos casos, los padres o los titulares de la riqueza no toman las medidas necesarias para asegurar que sus hijos o sucesores comprendan tanto el valor de sus activos como cómo acceder a ellos cuando llegue el momento.

Retención de activos y desgaste generacional

El dato más relevante de la encuesta mencionada anteriormente es la inestabilidad existente en la gestión de los patrimonios de clientes de mayor edad cuando se transfiere a la siguiente generación. En este sentido, un 42% de los asesores españoles reconocen que tras un salto generacional han visto como se producía un cambio radical en la gestión del patrimonio. Por tanto la transferencia de activos a los herederos parece ser un punto crítico.

Enfoque en la planificación patrimonial

Para abordar esta problemática, la mayoría de los inversores en España se están concentrando en una buena planificación patrimonial familiar. Un 89% habla regularmente de este tema con sus asesores, lo que sugiere una apuesta por involucrar a las siguientes generaciones en la gestión del patrimonio familiar. También es una realidad que los herederos están empezando a involucrarse de manera activa en la toma de decisiones.

Falta de enfoque en las generaciones jóvenes

Otro aspecto importante es la falta de cultura financiera existente en las generaciones más jóvenes (de 18 a 34 años), lo que limita la capacidad y la toma de buenas decisiones de inversión. De hecho, solo el 45% de las entidades financieras españolas parece estar tomando en cuenta a este grupo demográfico, lo que es preocupante dado que estas generaciones, que están acumulando riqueza, podrían ser un motor de crecimiento futuro.

La idea clara que tenemos que sacar de este informe, es la necesidad de tomar buenas decisiones financieras de cara al patrimonio familiar, y por supuesto, a la hora de invertir. Es fundamental ser conscientes de la importancia de asentar las bases de un sólido plan estratégico en línea con una correcta gestión patrimonial. Aquí un mensaje prioritario y a la vez muy claro es que invertir no es un fin en sí mismo, sino el medio para conseguir nuestros objetivos.

En Cobas AM siempre hemos tenido una fuerte labor divulgativa, fomentando el acceso y comprensión de la educación financiera, para que en entornos como el descrito en el artículo, en el cual de una forma u otra todos pasaremos por un escenario parecido, podamos tener capacidad para tomar decisiones importantes de la forma más coherente con nuestro proyecto personal y familiar que nos permita proteger de la mejor forma posible nuestro patrimonio.

Invertir no es solo una estrategia financiera, sino una ventana que nos permite observar de primera mano los mecanismos de la transferencia de riqueza. Al adentrarnos en el mundo de las inversiones, podemos sentar las bases de un aprendizaje sólido para hacer frente a un entorno de transferencias patrimoniales cada vez más complejo.

 

¿Te ha resultado útil?

  • |